Texto de
José Antonio Arias (*)
Imágenes Tomadas de Internet.
La historia y la trayectoria de los gallos Kelso, ha sido descrita con amplitud en páginas anteriores, sim embargo conviene agregar e insistir en algunos datos prácticos, que nos orienten respecto del juzgamiento de este tipo de familias.
Mr. Walter Kelso
Hay que recordar que cuando Walter Kelso dejó este mundo y sus aves se desperdigaron en gran parte de la Unión Americana, no todos sus lotes de crías tenían las mismas características y podemos encontrar gran variedad de colores de plumaje, que van desde el pinto, el colorado típico, el retinto y tonalidades de los mismos, así como variedades en Cabeza Redonda y Cabeza Cuadrada, diversidad de patas, como Patas Amarillas, Patas Blancas (aunque también tenemos referencia por parte de J. Jumper, gallinas Kelso patas azules). Esta diversidad se ha prestado para las discusiones y controversias, ya que mucha gente asegura que el Kelso que posee es el auténtico y todas las demás son imitaciones, pero así dicen todos en general.
No hay que olvidar que a lo largo de cinco o seis décadas se tiene que dar forzosamente un cambio influenciado por la genética misma y directamente por la mano o sensibilidad de cada criador y es por esto en determinado lugar predominaron y se perfeccionaron, ciertos prototipos (como por ejemplo en ciertas partes del Estado de Texas, los Kelso retintos Cabeza Cuadrada Patas Amarillas, o en el sureste algunos Kelso Cabeza Redonda, Colorados, Patas Blancas, etc.). Y de esta forma así como predominaron y se perfeccionaron en las manos de los criadores modernos, ciertos tipos de los Kelso, en otros lugares no tuvieron tanta suerte, por haber caído en manos no tan competentes, y a raíz de esto desaparecieron o se degeneraron a tal grado, que ya no tiene ni gran valor, ni gran importancia.
Mucho tiempo se consideró al Kelso como el gallo ideal para la Navaja Mexicana, sin embargo a pesar del éxito que tuvo y sigue teniendo, con el tiempo ha venido a ser desplazado por algunas familias más competitivas.
Se dice que el auténtico gallo Kelso (por lo menos algunos de ellos) tiene la desventaja de no tener tanto fondo, como por ejemplo los Hatch, y en cambio otras opiniones y que seguramente se refieren a grupos familiares diferentes, que emigraron a otra región de Estados Unidos, opinan que son extremadamente finos.
Por todo lo anterior expuesto, creemos necesario advertir a nuestros lectores que cuando vean o busquen un gallo Kelso, tengan la conciencia que pueden encontrarse con diferentes prototipos y múltiples variantes tanto en el color, color de patas, tipo de cabeza y calidad combativa.
De ahí que resulta fundamental, revisar la procedencia de la familia en cuestión, así como su historia genética, en lo referente a sus récords y comportamiento durante la pelea en varias generaciones.
(*) El Dr. José Antonio Arias G. es uno de los más destacados escritores de la ciencia y arte del gallo de combate de México, es criador del gallo navajero y profesor de la Universidad Nacional de México en la ciencia de la veterinaria y zootecnia. Ha escrito 5 libros sobre el gallo de combate.